Debates públicos es un espacio de reflexión que estrena sus páginas con la intención de contribuir al diálogo democrático y el intercambio de las ideas.
Si la mesura, como afirmaba Weber, es el «hábito de la distancia», de la reflexión podría decirse que es su correlato: el procedimiento que nos reencuentra mejor pertrechados con la realidad, con los demás y por qué no, con nosotros mismos. Un encuentro dialógico y reflexivo es precisamente lo que Debates Públicos procurará promover.
Somos voces y miradas diversas procedentes de la filosofía, la historia y la teoría política. Tres son los temas que concentran nuestra atención: democracia, república y liberalismo, estudiados a la luz de autores y corrientes modernos y contemporáneos. Su referencia explícita acompaña al título del Programa de Pensamiento Político del cual Debates públicos será su órgano de difusión y el puente, además, que nos vincule con el análisis de la actualidad.
No nos asiste ninguna verdad que proclamar ni pretendemos ceñir el análisis de los tópicos referidos a un enfoque cerrado o reduccionista. Particularmente, con relación al debate entre las respuestas textualistas y contextualistas, consideramos, en línea con Fernado Vallespín, que en un objeto de estudio tan “matizable y escurridizo” como es la historia del pensamiento político, es preferible “apostar por una postura ecléctica que sepa integrar las mejores intuiciones de cada enfoque”.
En circunstancias signadas por la intransigencia y los ideologismos, vemos en el disenso la savia de las sociedades libres y el puntal de las concesiones recíprocas que se requieren siempre y dondequiera para cimentar la convivencia y proyectarla en el tiempo. Fomentar esta suerte de compromiso será también parte de nuestros propósitos.
Con la esperanza de todas las iniciaciones y el deseo de que nuevos lectores y plumas vayan sumándose a Debates públicos, nos presentamos de este modo en sociedad agradeciendo especialmente a aquellos que hicieron posible que este anhelo pudiera hoy materializarse.